Mantas Térmicas Montaña, Camping y Trail Running

Análisis:

Con un par de mantas térmicas de emergencia Mylar en tu mochila puedes salir al monte con total seguridad.

Las mantas de emergencia de montaña Mylar retienen el 90% del calor corporal, no pesan casi nada y son lo suficientemente grandes como para envolverlas de manera segura.

Son resistentes a las bacterias y tienen múltiples usos; competiciones de trail, calor adicional en la tienda, supervivencia, etc.

Análisis:

Con esta manta de rescate, una navaja, un mechero y una linterna o frontal puedes hacer frente a cualquier imprevisto en la montaña con total seguridad de solventar la situación.

Recomendada para competiciones de trail running, trekking, senderismo y para acampar en la montaña.

Análisis:

Quizás no es la clásica manta térmica de emergencia que tenemos en mente y no retiene el calor de la misma manera que una manta Mylar aluminizada pero proporciona mucha más comodidad de uso.

Análisis:

Se trata de una manta con varias capas que evitan que el calor corporal se escape.

Proporciona mejor retención del calor que la lana y es más cómoda que las mantas Mylar y es más duradera que ambas.

Análisis:

De prestaciones similares a Mylar la marca SOL proporciona algo más de durabilidad en sus materiales y es una buena manta térmica para añadir a tu kit de montañismo.

Análisis:

Una manta térmica básica pero que cumple con lo que necesitas ante un imprevisto en la montaña; calor, impermeabilidad y resistencia al viento.

Fundamental como complemento en tu kit de supervivencia en la mochila para ir de viaje, senderismo o ultra trail.

El 90% de todas las mantas de emergencia que se venden hoy en día son de mylar y por muy buenas razones.

Primero, retienen prácticamente todo el calor de tu cuerpo, segundo, no pesan casi nada por lo que son fáciles de llevar a la montaña contigo y tercero, tienen un precio muy barato.

Existen mantas térmicas fabricadas en otros materiales pero normalmente son más pesados y mucho más caros. Sin embargo, te pueden proporcionar la comodidad o confort que no aporta el mylar.

La mayoría de las mantas de supervivencia, ya sean de mylar u otros componentes suelen tener unas dimensiones de dos metros de largo por metro treinta, treinta y cinco de ancho.

Eso es lo suficientemente grande como para cubrir un promedio de 1 metro 80 cm de altura o para dos personas más pequeñas o niños, si es necesario.

También es lo suficientemente grande como para colocarla en el suelo y colocar tu saco de dormir sobre ella y dormir bajo las estrellas y disfrutar de una noche de verano en las montañas.

La manta térmica estándar de mylar pesa entre 55 y 70 gramos, por lo que puedes llevar más de una sin problemas en la mochila para viajes de trekking de varias semanas.

Las mantas de emergencia más pesadas, funcionales y de altas prestaciones, como las mantas militares con el 80% de lana o mantas súper extremas, pueden pesar hasta 3 kg y ocupar un espacio considerable en la mochila.

Aunque seguro merece la pena guardar una en el maletero del coche o en el trastero de casa por si se da una situación de emergencia.

Una buena manta térmica debe ser impermeable, ya que el frío o el calor no son el único peligro ante una emergencia durante una excursión de trekking o por inclemencias meteorológicas de gran alcance en casa; inundaciones, tormentas, fuertes rachas de lluvia, nevadas y viento, etc.

Afortunadamente las verdaderas mantas mylar son 100% impermeables. Debes tener cuidado con las imitaciones ya que darán el pego pero no son impermeables. Compra siempre en tiendas de confianza.

Para mantener el calor al aire libre se trata tanto de retener el corporal como de bloquear el viento, ya que éste incrementa la sensación térmica del frío.

Cualquier manta de supervivencia digna de ese nombre es una barrera eficaz contra vientos fríos y penetrantes que podrían sumirte en un estado de hipotermia de manera rápida.

Dado que una manta reflectante promedio tiene un espesor de 12 micrones y pesa solo unos pocos gramos, la durabilidad no es algo a tener muy en cuenta.

Las mantas térmicas son una solución para el corto plazo, situaciones y casos excepcionales.

Si quieres una manta térmica duradera la mejor opción es comprar una manta de lana del 80%, que bien cuidada se mantendrá en perfectas condiciones en tu equipo de montaña durante muchos años.